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lunes, 10 de septiembre de 2007

Demagogia

De las últimas iniciativas del ahora llamado Gobierno de España, antes Gobierno central, y del Gobierno andaluz se puede deducir que ya estamos en campaña electoral, aunque queden seis meses para las elecciones, y que, además, el PSOE tiene un cierto temor a perderlas, al menos las generales. Y, ya se sabe, un gobierno con miedo de perder se vuelve, a veces, demagógico. Y, para muestra, la iniciativa de la ley para regular el derecho de acceso a la vivienda de la Junta de Andalucía. La iniciativa presentada es, para empezar, demagógica porque su redacción es engañosa. Da la sensación de que puede beneficiar a todos o, al menos, a una mayoría (por ese límite de renta de los 37.440 euros que fija), pero, cuando se lee con detenimiento el artículo 4 de la iniciativa, uno se da cuenta de que la trampa está en que los beneficiarios serán esa minoría que no tiene vivienda en propiedad. O sea, que no se está pensando en los que están cargando con una hipoteca desde hace unos años, esa mayoría de los andaluces que han cometido la estupidez de comprar una casa, sino en los jóvenes (incluso en los hijos de papá) y en los inmigrantes. 

Además, la iniciativa es demagógica porque es jurídicamente inviable. Y ello porque el Gobierno andaluz sabe que el incumplimiento de la ley no tendría ningún efecto. ¿O alguien se imagina que los jueces, ante un incumplimiento, meterán en la cárcel o multarán al Gobierno andaluz, a la consejera o a los funcionarios? ¿O que para cumplirla se lanzará la Junta a una expropiación masiva? 

Más aún, la iniciativa es demagógica porque Chaves sabe que es políticamente inaplicable. Y es que si se abre el capítulo de la exigibilidad de los principios programáticos de la Constitución (una vieja idea de Anguita) nos ahogaremos en un mar de leyes inviables. Porque a este de la vivienda le debe seguir el del empleo (artículo 35 de la Constitución), que es la primera preocupación de los andaluces y es, además, un deber. Por cierto, si es tan buena esta ley, ¿por qué el PSOE, que también gobierna en Madrid, no ha llevado la iniciativa a través del Ministerio de la Vivienda como ley para todos los españoles? 

Item más, la iniciativa es demagógica porque los que la han escrito saben que es económicamente insostenible, ya que depende de las transferencias que, para materia de vivienda, se hagan desde el Gobierno central y de la acción de los ayuntamientos, ya ahogados económicamente. Y, finalmente, la iniciativa es estúpidamente demagógica porque es asombroso que la Junta crea ahora que va a resolver el problema del chabolismo o de nuestros barrios marginales con una simple declaración de voluntades y de apelación a la Constitución. Y es que, si es tan fácil, ¿cómo es que el Gobierno andaluz ha tardado veinticinco años en darse cuenta de su necesidad? 

Lo siento, pero tanta demagogia, de estilo venezolano, solo manifiesta la ignorancia de que los que nos gobiernan han venido haciendo gala en temas de mercados de vivienda, y que les ha llevado de fracaso en fracaso en este apartado. Y es que si supieran cómo funcionan los mercados de vivienda no hubieran pifiado con la agencia pública de alquileres, hubieran sido más eficaces a la hora de controlar el crecimiento de los precios, de ordenar el territorio o de hacer cumplir los planes de VPO. Si hubieran sido eficaces en los veinticinco años que llevan gobernándonos, no tendríamos las barriadas con infraviviendas en nuestras ciudades y no necesitaríamos una ley que nos reconociera el derecho porque ya lo ejerceríamos. 

No sé si el PSOE puede ganar algún voto con iniciativas como ésta. El mío, desde luego, no, aunque solo fuera porque, a veces, me molesta que crean que los ciudadanos somos tontos. 

10 de septiembre de 2007 

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