Páginas

lunes, 26 de abril de 2004

Hacia el este

La próxima semana seremos diez socios más en la Unión Europea. Ocho socios más en el Este y dos mediterráneos que trasladan a la UE hacia el Este. Diez socios de tamaño, economía, sociedad y vínculos históricos diferentes que harán a la Unión diferente. Tan diferente que la posición, y no sólo la geográfica, de todos los actuales socios cambia. Tan diferente que algunas de las decisiones más recientes de la Unión, la última reforma de la Política Agraria Común, por ejemplo, se explicarán, en gran medida, por el nuevo contexto. Lo preocupante es que la entrada de los socios del Este y las nuevas correlaciones de intereses en la Unión, a pesar de los diez años desde que se inició el proceso, no han sido objeto de reflexión en España. 

Los nuevos socios que entran en la Unión son, entre ellos, muy dispares. Y eso hace que las causas por las que entran y los efectos que cada uno de ellos producirán sobre el conjunto de la Unión sean muy diferentes. 

Para empezar, entre los diez nuevos socios hay uno, Polonia, que supone la mitad de la población y del PIB del total de la ampliación. Los tres siguientes en tamaño, Chequia, Hungría y Eslovaquia, suman el 34% de la ampliación. Los seis restantes son muy pequeños, alguno, como Malta, tan pequeño que supone la mitad de la población de nuestra provincia. Sus vinculaciones históricas también son variadas. Así, y aunque la mayoría de ellos han estado hasta tiempos recientes bajo el dominio directo o indirecto de Rusia, los viejos lazos históricos son más complejos. Los tres estados bálticos (Lituania, Estonia y Letonia), además de una historia común (y parte de su población) con Rusia, tienen fuertes vínculos con Polonia y con los países escandinavos. Polonia, Chequia, Eslovaquia y Hungría fueron parte de uno de los dos Imperios Germánicos (Alemania o Austria), lo mismo que la balcánica Eslovenia. Las dos islas mediterráneas (Chipre y Malta) fueron protectorados británicos hasta no hace tanto tiempo y tienen amplias relaciones con sus dos vecinos más grandes, Grecia e Italia. Desde una perspectiva histórica y geográfica, pues, se benefician de la ampliación con más intensidad los ejes germánico y escandinavo de la Unión. Conocidos estos vínculos históricos y geográficos, que se traducen en que el comercio exterior y la inversión extranjera directa de estos países está dominado por los socios de la Unión más próximos a ellos, el interés de la ampliación, desde la perspectiva de la UE, es claro: la suma de los cuatro más grandes y más próximos a Alemania suponen un importante mercado de 64 millones de personas, una fuerza laboral de más de 25 millones con sueldos bajos, y unas inmensas posibilidades de expansión por las carencias y necesidades de infraestructuras, tanto públicas como privadas. Y Alemania y sus economías satélites necesitan, para crecer, mercados con expectativas y mano de obra barata en territorios próximos. Además, con la integración y el desarrollo de estos países se empieza a regular el flujo de inmigrantes y se expanden las fronteras políticas hacia el Este. Visto desde nuestros nuevos socios, la razón estratégica para entrar en la UE es la que no ser más territorio fronterizo, "estados-tapón", entre dos gigantescos bloques (Europa Occidental y Rusia) que tan desastrosas consecuencias les trajo en el pasado. Por eso, la mayoría de ellos pertenecen a la OTAN y, puesto que la UE es el polo más rico de sus vecinos y puede ser el más generoso en las ayudas y en las transferencias de tecnología, la entrada en la UE supone una garantía de desarrollo económico y de estabilidad política. Todo ello, al tiempo que los sitúa en el mundo como parte de una economía poderosa. 

Esta semana entran diez nuevos países en la Unión Europea. Tanto para bien como para mal de nuestros legítimos intereses la Unión Europea será diferente a partir de ahora. Como diría un marino, derrota hacia el Este. Y saber hacia dónde rola el viento es importante para pensar lo que tenemos que hacer. Pero eso lo haremos mañana. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario